Se dice que todos tenemos un doble en alguna parte del mundo. Alguien que es prácticamente idéntico a nosotros en cuanto al aspecto físico. En inglés, este doble se conoce como look-alike, double o doppelganger.
La palabra doppelganger o doppelgänger es un préstamo del alemán y, originalmente, designaba al homólogo fantasmagórico de una persona, es decir, una especie de espíritu idéntico a un ser humano viviente.
De acuerdo con el folclore alemán, todo ser vivo tiene un doble que es invisible pero idéntico a él. En 1796, el escritor alemán Johann Paul Richter acuñó el término Doppelgänger (de doppel, “doble”, y gänger, derivado de «Gang», “paseo”) para referirse a estos espectros. Literalmente, pues, esta palabra significa “doble que va”, aunque también puede usarse para referirnos al “alter ego” de una persona.
El año pasado se estrenó el documental “Finding My Twin Stranger”, resultado de una colaboración entre el canal de televisión británico Channel 4 y el equipo del Department of Twin Research del hospital de St. Thomas de Londres. En él se analizaba el parecido de siete parejas de desconocidos que eran idénticos des de todos los punts de vista posibles. El éxito de este documental, sumado a la facilidad con la que actualmente podemos contactar con gente de todo el mundo gracias a Internet, ha disparado la popularidad de las páginas web dedicadas a encontrar doppelgangers e incluso de muchos proyectos artísticos, como el de François Brunelle.
Pero encontrar tu propio doppelganger es tan o más difícil que decir esta misma palabra al revés. ¡Las probabilidades son de una entre un billón!
¿Quieres saber un poco más? Pincha aquí y échle un vistazo a este artículo de la BBC sobre los doppelganger.